BECHOL LASHON Español – Génova, refugiados en el muelle
Tras la expulsión definitiva de España de los judíos en 1492, las embarcaciones llenas de refugiados se esparcieron a lo largo del Mediterráneo. Muchas se hundieron. Algunas llegaron al puerto de Génova. En aquella época, el gobierno de la ciudad no aprobaba la presencia judía dentro de sus muros, a pesar de que se les concedieron a los expatriados unos salvoconductos. Esperando ser recibidos, o expulsados, muchos judíos se vieron obligados a quedarse en el muelle en condiciones muy desfavorables. Fue a principios de 1493 y hacía mucho frío. Muchos se convirtieron, otros murieron y otros fueron vendidos como esclavos. Otros fueron recibidos por la ciudad de Ferrara. El canciller genovés Bartolomeo Senarega en su Crónaca histórica nos ha dejado un testimonio de este acontecimiento, con palabras cargadas de compasión.
*Anna Foa, historiadora
Traducido por Mattia Stefani, estudiante de la Escuela Superior para Intérpretes y Traductores de la Universidad de Trieste, de prácticas en la oficina del periódicos de la Unión de las Comunidades Judías Italianas.